miércoles, 18 de septiembre de 2013

El acólito


Seminarista descarrilado, diácono simulado, supuesto profesor de teología descabalgado, enfermero jubilado, escritor aficionado, acólito consumado y sobre todo, pelota del poder establecido profesionalizado. Ese es José Marcelino García, cronista y heraldo del socialismo de Carreño,  que hoy en El Comercio publica un artículo bajo el título "moción de censura", repartiendo mandobles a la oposición política municipal, con especial   dedicación al Partido Popular, al que este ilustre escribidor llama "la gaviota". En la otra cara de la moneda, los elogios al alcalde llegan a tal grado de arrastramiento engolado, que la carcajada inicial torna en compasión y ternura finales. ¿Qué sentir si no,  al ver a un conciudadano de tan provecta edad reptando por el fango de la adulación?.

¿Qué le pasará a José Marcelino?. Lo cierto es que en años recientes disfrutó amplia y visiblemente su condición de poeta del alba en el amanecer candasín de la festividad del Santísimo Cristo. Sin embargo, parece que la gloria pasajera inherente al nombramiento precitado, no es suficiente. Se dice que lo que realmente  priva a José Marcelino es la idea de transformarse de cronista del alcalde en cronista del concejo de Carreño.  Parece concluir que pasando la mano por el lomo del alcalde, al mismo tiempo que califica a sus opositores de "inteligencia menguada", "ineptos", "patriotas del maletín", "ojeadores e inquisdores en un permanente estado de conspiración y ansiedad",  podría llegar a alcanzar su meta querida, su gusto infinito por extender sus crónicas almibaradas al ser y estar oficial de nuestro concejo.

Lo cierto es que José Marcelino es grande.  Gracias a su sapiencia acabamos de descubrir que Carreño es el único municipio de España en el que su glorioso alcalde ostenta la competencia gestora en materia de sanidad y educación. ¡Los carreñenses tenemos sanidad y educación gracias a la PSOE y al alcalde Riego!, grita el cronista oficial a la expectativa. La gestión de nuestro primer edil es "altamente positiva" en materia de empleo, dice el heraldo sin par. ¿También le debemos al primer edil de Carreño los más de novecientos vecinos que están sin trabajo?. ¿Un logro altamente positivo?. José Marcelino, el látigo de la oposición, responde que sí.

Gracias José Marcelino. Muchas gracias. Gracias de corazón por permitirnos saber su fundada y aleccionadora opinión. Infinito agradecimiento por mostrarse tal y como es. Sin máscaras ni disimulos. Socialista hasta las cachas, a la par que acólito disfrazado con una impoluta alba en la Iglesia de los perlorinos, vecinos de Carreño que mayoritariamente estarán dando saltos de alegría al ver  las crónicas de este destacado socialista, de loa y elogio a un alcalde específicamente castigador de esa parroquia del concejo. 

Dicho lo cual, desde esta humilde morada de la gaviota carreñense, nos despedimos ya  estimado convecino. Como diría su añorado Felipe González, otro socialista de pedigrí: sin acritud.