miércoles, 30 de enero de 2013

CARREÑO TERMINÓ 2011 EN NÚMEROS ROJOS. SE CONFIRMA LA DELICADA SITUACIÓN DE LAS FINANZAS MUNICIPALES


Poco a poco vamos conociendo datos que nos permiten hacernos una idea de la situación económica y financiera en la que realmente se encuentra el Ayuntamiento de Carreño. Concretamente, en la última comisión informativa de Hacienda se informó de que 2011 terminó con un remanente de tesorería negativo de 106.000 euros.

En este punto ha de señalarse que el  remanente de tesorería, además de ser su principal magnitud contable y presupuestaria, constituye el indicador clave de la liquidez de cualquier ayuntamiento. La obtención de esta variable se determina minorando a los fondos líquidos (dinero en caja)  y a los derechos pendientes de cobro,  las obligaciones pendientes de pago. Cuando al cierre de un ejercicio el remanente de tesorería es positivo (lo que denota un superávit financiero), la normativa vigente permite que la corporación pueda utilizar ese excedente y presupuestar para el ejercicio siguiente una cifra de gasto superior a los ingresos presupuestados, en dicho superávit. Sin embargo, si el remanente de tesorería con el que se cierra el ejercicio es negativo (lo que supone la existencia de un déficit financiero), la corporación municipal deberá, básicamente, aprobar para el ejercicio siguiente un presupuesto con un superávit al menos equivalente al remanente de tesorería negativo del ejercicio anterior; o deberá aprobar un plan de ajuste a aplicar en varios ejercicios para restablecer el equilibrio financiero.

En el caso de Carreño, el dato anteriormente referido nos permite advertir que el último ejercicio del que se tienen datos, 2011, cerramos el año en números rojos, mostrando nuestras cuentas municipales un rasgo característico de la insolvencia a corto plazo.

Desde el PP de Carreño valoramos este dato como especialmente relevante por las siguientes razones:

1) Desmiente el “mantra” de los socialistas de Carreño, consistente en señalar que la situación económica municipal es boyante, envidiable y un ejemplo de buena gestión. Es evidente que cerrar un ejercicio con  un gasto descontrolado que supera los ingresos, no es sinónimo de buena gestión.

2) El dato conocido es especialmente alarmante porque  hemos pasado de tener un remanente positivo de 3000.000 de euros en 2007, 2.800.000 en 2008, 1.800.000 en 2009, 581.000 en 2010 a tener 106.000 euros de remanente negativo en 2011. De lo anterior se desprende que en 4 años, y sin que el Gobierno haya reaccionado al respecto, hemos pasado de cubrir los gastos con aparente facilidad a estar en números rojos.

3)  Queda confirmado que la necesidad de acudir al plan de ajuste para hacer frente al pago de las facturas pendientes de abono a 1 de enero de 2012 fue un hecho obligado ante la ausencia de fondos municipales para hacer frente a las obligaciones del Ayuntamiento.

4) Queda confirmada asimismo la irresponsabilidad socialista que se cifra en que el gobierno local pretendió, precisamente a finales de 2011, al mismo tiempo que incurríamos en más gastos que ingresos, pedir un préstamo de 1.500.000 euros, el cual fue desestimado gracias a los partidos de la oposición y que de haberse pedido, hubiera engordado la deuda pública muy por encima de nuestras posibilidades.

5) Los socialistas han hecho oídos sordos a los llamamientos del PP en la línea de afrontar reformas estructurales que redujeran el gasto corriente, acomodando el gasto público a unos ingresos cada vez más mermados. En contraposición con lo anterior, la política socialista ha consistido en:

     Elevar cada vez más el gasto corriente o estructural, que en el presupuesto de 2012 ascendió al 95% de los gastos. Es ese gasto el que consume el presupuesto: subvenciones, transferencias corrientes, gasto de personal descontrolado en horas extraordinarias y trabajos de superior categoría mientras las vacantes de limpieza ni siquiera están presupuestadas. En contraposición,  las inversiones presupuestadas son imaginarias, dado que ante la ausencia de dinero, no se ejecutan.

     Subir impuestos y especialmente tasas que afectan a servicios básicos como el agua, la recogida de residuos y el alcantarillado, mientras los servicios afectados y otros municipales no dejan de empeorar.

     La predilección socialista es siempre la misma: subvenciones por todo lo alto y mantenimiento a toda costa de proyectos fallidos como la Mancomunidad o el Museo de la Pesca, cuya viabilidad sigue defendiendo el alcalde de Carreño.

     Un abandono cada vez mayor de la limpieza,  la jardinería y la conservación de los espacios públicos  en el casco urbano de Candás, así como despreocupación por las inversiones básicas de mantenimiento en la zona rural. A todo lo cual se puede añadir el colapso de los servicios municipales.

Desde el PP instamos a los socialistas a que reconozcan la realidad, pisen el suelo de una vez y afronten las verdaderas necesidades de nuestro concejo, presentando un presupuesto que termine con el déficit provocado por el desaforado gasto corriente, que es sinónimo de gastos superfluos, concentrando el dinero público en los servicios esenciales de un municipio actualmente en estado de abandono.

LA NOTICIA EN LA PRENSA:

LA CUENTA MUNICIPAL,  EN NÚMEROS ROJOS

CARREÑO CERRÓ 2011 CON UN SALDO NEGATIVO DE 106.000 EUROS, SEGÚN EL PARTIDO POPULAR