Poco a poco
vamos conociendo datos que nos permiten hacernos una idea de la situación económica y financiera en la que realmente se encuentra el Ayuntamiento de Carreño.
Concretamente, en la última comisión
informativa de Hacienda se informó de que 2011 terminó con un remanente de
tesorería negativo de 106.000 euros.
En este punto ha
de señalarse que el remanente de
tesorería, además de ser su principal
magnitud contable y presupuestaria, constituye el indicador clave de la liquidez
de cualquier ayuntamiento. La obtención de esta variable se determina minorando a los fondos
líquidos (dinero en caja) y a los
derechos pendientes de cobro, las
obligaciones pendientes de pago. Cuando al cierre de un ejercicio el
remanente de tesorería es positivo (lo que denota un superávit financiero), la
normativa vigente permite que la corporación pueda utilizar ese excedente y
presupuestar para el ejercicio siguiente una cifra de gasto superior a los
ingresos presupuestados, en dicho superávit. Sin embargo, si el remanente de tesorería con el que se cierra el ejercicio es
negativo (lo que supone la existencia de un déficit financiero), la corporación
municipal deberá, básicamente, aprobar para el ejercicio siguiente un
presupuesto con un superávit al menos equivalente al remanente de tesorería
negativo del ejercicio anterior; o deberá aprobar
un plan de ajuste a aplicar en varios ejercicios para restablecer el equilibrio
financiero.
En
el caso de Carreño, el dato anteriormente referido nos permite advertir que el último ejercicio del que se tienen
datos, 2011, cerramos el año en números rojos, mostrando nuestras cuentas
municipales un rasgo característico de la insolvencia a corto plazo.
Desde
el PP de Carreño valoramos este dato como especialmente relevante por las
siguientes razones:
1) Desmiente el
“mantra” de los socialistas de Carreño, consistente en señalar que la situación
económica municipal es boyante, envidiable y un ejemplo de buena
gestión. Es evidente que cerrar un
ejercicio con un gasto descontrolado que
supera los ingresos, no es sinónimo de buena gestión.
2) El dato conocido es especialmente alarmante
porque hemos pasado de tener un remanente positivo de 3000.000 de euros en
2007, 2.800.000 en 2008, 1.800.000 en 2009, 581.000 en 2010 a tener 106.000 euros
de remanente negativo en 2011. De lo anterior se desprende que en 4 años, y
sin que el Gobierno haya reaccionado al respecto, hemos pasado de cubrir los
gastos con aparente facilidad a estar en números rojos.
3) Queda
confirmado que la necesidad de acudir al
plan de ajuste para hacer frente al pago de las facturas pendientes de abono a
1 de enero de 2012 fue un hecho obligado ante la ausencia de fondos
municipales para hacer frente a las obligaciones del Ayuntamiento.
4) Queda
confirmada asimismo la irresponsabilidad
socialista que se cifra en que el gobierno local pretendió, precisamente a
finales de 2011, al mismo tiempo que incurríamos en más gastos que ingresos,
pedir un préstamo de 1.500.000 euros, el cual fue desestimado gracias a los
partidos de la oposición y que de haberse pedido, hubiera engordado la
deuda pública muy por encima de nuestras posibilidades.
5) Los socialistas han hecho oídos sordos a los
llamamientos del PP en la línea de afrontar reformas estructurales que
redujeran el gasto corriente, acomodando el gasto público a unos ingresos
cada vez más mermados. En contraposición con lo anterior, la política socialista ha consistido en:
Elevar cada vez más el gasto corriente o
estructural, que en el presupuesto de 2012 ascendió al 95% de los gastos. Es ese gasto el que consume el presupuesto:
subvenciones, transferencias corrientes, gasto de personal descontrolado en
horas extraordinarias y trabajos de superior categoría mientras las vacantes de
limpieza ni siquiera están presupuestadas. En contraposición, las
inversiones presupuestadas son imaginarias, dado que ante la ausencia de
dinero, no se ejecutan.
Subir impuestos y especialmente tasas que afectan
a servicios básicos como el
agua, la recogida de residuos y el alcantarillado, mientras los servicios
afectados y otros municipales no dejan de empeorar.
La
predilección socialista es siempre la misma: subvenciones por todo lo alto y mantenimiento a toda costa de proyectos
fallidos como la
Mancomunidad o el Museo de la Pesca , cuya viabilidad
sigue defendiendo el alcalde de Carreño.
Un abandono cada vez mayor de la limpieza, la jardinería y la conservación de los
espacios públicos en el casco urbano de
Candás, así como despreocupación por las inversiones básicas de mantenimiento
en la zona rural. A todo lo cual se puede añadir el colapso de los servicios municipales.
Desde el PP
instamos a los socialistas a que reconozcan la realidad, pisen el suelo de una
vez y afronten las verdaderas necesidades de nuestro concejo, presentando un presupuesto que termine con el
déficit provocado por el desaforado gasto corriente, que es sinónimo de gastos
superfluos, concentrando el dinero público en los servicios esenciales de un
municipio actualmente en estado de abandono.
LA NOTICIA EN LA PRENSA:
LA CUENTA MUNICIPAL, EN NÚMEROS ROJOS
CARREÑO CERRÓ 2011 CON UN SALDO NEGATIVO DE 106.000 EUROS, SEGÚN EL PARTIDO POPULAR
LA NOTICIA EN LA PRENSA:
LA CUENTA MUNICIPAL, EN NÚMEROS ROJOS
CARREÑO CERRÓ 2011 CON UN SALDO NEGATIVO DE 106.000 EUROS, SEGÚN EL PARTIDO POPULAR